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Para: Ministra del Ambiente, Elsa Galarza Contreras y Gobernador regional de Ancash, Luis Gamarra Alor
Descontaminar el río Santa - Perú
Estimados Ministra y Gobernador: es tiempo de que de verdad se note que hay un ministerio del ambiente en el Perú.
Tantos ríos de nuestro país, que a causa de la contaminación, son totalmente inútiles. Descontaminarlos podría ser la solución a muchos problemas.
Les pediría que empecemos por Ancash, limpiar el río, acabar con los agentes contaminantes de las riveras del río y que el agua sirva a la población. Actualmente este río no proporciona ni una gota de agua potable por estar muy contaminado.
Tantos ríos de nuestro país, que a causa de la contaminación, son totalmente inútiles. Descontaminarlos podría ser la solución a muchos problemas.
Les pediría que empecemos por Ancash, limpiar el río, acabar con los agentes contaminantes de las riveras del río y que el agua sirva a la población. Actualmente este río no proporciona ni una gota de agua potable por estar muy contaminado.
¿Por qué es importante?
Es importante por el agua.
Mucha gente que carece de este recurso a nivel nacional, y tantos ríos contaminados, acabando con los agentes contaminadores de todo lo largo de la rivera del Río Santa, muchas personas podrían utilizar el agua del río para consumo, para la agricultura, ganadería, etc.
Mientras miles de personas mueren en todo el mundo por falta de agua, en el Perú se desperdicia este preciado recurso, ya es hora de darnos cuenta de cuanto valor tiene y que de nosotros depende que nuestras futuras generaciones puedan tener al alcance este recurso, tan importante para la vida.
Mucha gente que carece de este recurso a nivel nacional, y tantos ríos contaminados, acabando con los agentes contaminadores de todo lo largo de la rivera del Río Santa, muchas personas podrían utilizar el agua del río para consumo, para la agricultura, ganadería, etc.
Mientras miles de personas mueren en todo el mundo por falta de agua, en el Perú se desperdicia este preciado recurso, ya es hora de darnos cuenta de cuanto valor tiene y que de nosotros depende que nuestras futuras generaciones puedan tener al alcance este recurso, tan importante para la vida.