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Para: Secretario de Recursos Hídricos, Néstor Pedro Lastiri
El agua también nos pertenece
Estimado Secretario: me indigna muchísimo el actuar de la provincia vecina, Mendoza, quien por medio de un embalse construido en el límite de ambas provincias, privaron del cause natural del río Salado (del lado de la provincia de La Pampa y Atuel del lado de la provincia de Mendoza) y por consecuente causaron la sequía inevitable de nuestras tierras.
Y por lo tanto, la muerte de toda vegetación, de todos los animales, como así también el abandono de sus hogares y sus campos de los habitantes del oeste de nuestra provincia.
Por favor, Señor Secretario, ¡haga algo al respecto!
Y por lo tanto, la muerte de toda vegetación, de todos los animales, como así también el abandono de sus hogares y sus campos de los habitantes del oeste de nuestra provincia.
Por favor, Señor Secretario, ¡haga algo al respecto!
¿Por qué es importante?
La importancia es obvia a la hora de analizar los motivos de nuestro reclamo.
El agua perteneciente al cause del río Salado que regaba las tierras del oeste pampeano, hoy ya no existen. Sólo queda tierra árida, jarillas y desolación.
En épocas de abundancia, los habitantes de esta región de La Pampa vivían en sus propias tierras, criando ganado, con vegetación verde y copiosa.
Hoy ya no es posible.
Esta gente tuvo que buscar otros horizontes e irse con las pocas cosas que les quedaron. Perdieron animales, ya que murieron de sed y hambre.
Mendoza construyó el embalse que impide el flujo de un río que antes era el responsable de la vigencia de casi todo el oeste de La Pampa.
Por eso, te pido que colabores con nosotros.
Los pampeanos también tenemos derecho a la vida, nos merecemos el derecho al agua, ¡¡también es nuestro!!
El agua perteneciente al cause del río Salado que regaba las tierras del oeste pampeano, hoy ya no existen. Sólo queda tierra árida, jarillas y desolación.
En épocas de abundancia, los habitantes de esta región de La Pampa vivían en sus propias tierras, criando ganado, con vegetación verde y copiosa.
Hoy ya no es posible.
Esta gente tuvo que buscar otros horizontes e irse con las pocas cosas que les quedaron. Perdieron animales, ya que murieron de sed y hambre.
Mendoza construyó el embalse que impide el flujo de un río que antes era el responsable de la vigencia de casi todo el oeste de La Pampa.
Por eso, te pido que colabores con nosotros.
Los pampeanos también tenemos derecho a la vida, nos merecemos el derecho al agua, ¡¡también es nuestro!!